Más de 1.100 personas asistirán al «IV Congreso de Esofagitis Eosinofílica (EoE)» de Barcelona

• Los expertos consideran que la esofagitis eosinofílica (EoE) es “una enfermedad de la era moderna” y que se ha empezado a diagnosticar hace 30 años. 
• La EoE es la primera causa de disfagia en la juventud y la media de retraso en el diagnóstico en niños es de 2,5 años, pero en adultos aumenta hasta una media de 7 años. La EoE es una enfermedad crónica, localizada en el esófago y que impide, en situaciones graves, incluso comer sólido. También la EoE es una de las principales causas de fagofobia. 
• Actualmente la prevalencia reconocida de la enfermedad es de 34.4/100.000 habitantes. Sin embargo, los expertos presentarán durante el Congreso los datos más actualizados que cifra el incremento en más de 100/100.000 habitantes en los últimos diez años.

El próximo sábado 21 de octubre se celebrará en el Hospital Sant Joan de Déu Barcelona el «IV Congreso Nacional de Esofagitis Eosinofílica (EoE)» que tiene como principal objetivo poner en relieve los principales avances en los tratamientos y líneas de investigación de la EoE, aportar conocimiento a los profesionales de la Sanidad que tratan esta enfermedad e intercambiar experiencias e inquietudes con los pacientes de esofagitis eosinofílica y sus organizaciones. El Congreso contará con la participación de alrededor de 1.100 personas (presenciales y online) cerca de 800 profesionales sanitarios (médicos, enfermeras y nutricionistas, principalmente) y 300 pacientes, investigadores y familiares de pacientes. La Dra. Ruth García, responsable de la Comisión Médica de la Asociación Española de Esofagitis Eosinofílica (AEDESEO) y miembro del Comité Científico del Congreso -junto con los doctores Dr. Alfredo Lucendo, presidente de EUREOS y jefe de Sección de Aparato Digestivo del Hospital de Tomelloso (Ciudad Real) y el Dr. Víctor Vila, pediatra gastroenterólogo del Hospital Sant Joan de Déu Barcelona, señala que “la realidad es que hoy en día está habiendo un gran incremento de personas con EoE y que el mayor conocimiento de los médicos sobre la EoE, el incremento de endoscopias o la mayor información en la sociedad sobre esta enfermedad no explica el incremento logarítmico de la EoE”. 

“En la actualidad hay mucho interés por investigar la EoE, aunque todavía no se conoce exactamente el origen de la enfermedad. Que tiene una base genética es indudable, pero también se ha comprobado una gran influencia de los factores ambientales en su desarrollo. Incluso, varias líneas de trabajo están investigando sobre cómo la manipulación genética de alimentos puede influir en la EoE”, explica la Dra. García quien añade que “también se está estudiando cómo la ‘teoría de la higiene’, que sugiere que una menor exposición a agentes infecciosos en la infancia puede aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades inmunológicas, puede influir en este crecimiento de la esofagitis eosinofílica”. 

El Congreso ha sido organizado por el Hospital Sant Joan de Déu Barcelona, la European Consortium for Eosinophilic Diseases of the Gastrointestinal Tract (EUREOS) y AEDESEO. El evento tendrá formato presencial y online, con diferentes mesas redondas con reconocidos expertos en la enfermedad donde se expondrán los últimos avances sobre el conocimiento del funcionamiento de la EoE, las nuevas terapéuticas o adaptaciones de las existentes, las líneas de investigación más destacadas, las novedades sobre los tratamientos dietéticos y un área temática muy importante hasta ahora no contemplada , cómo mejorar aspectos del área emocional que se ven afectados en los pacientes que sufren esofagitis eosinofílica. 

Esofagitis Eosinofílica 

La esofagitis eosinofílica (EoE) es una enfermedad crónica mediada por el sistema inmune, que provoca una inflamación del esófago tras su exposición a diferentes componentes de la dieta o, en menor medida, del ambiente. Descrita inicialmente hasta justamente tres décadas como una enfermedad rara, hoy día la EoE representa la principal causa de disfagia e impactación de alimentos en niños y en adultos jóvenes en nuestro medio. Sus síntomas son complejos y varían ampliamente con la edad de los pacientes, de manera que en los niños más pequeños causa principalmente náuseas y vómitos, dolor torácico o abdominal, alimentación lenta, aversión a la comida y, en ocasiones, pérdida de peso. En contraste, la disfagia, la impactación de alimentos en el esófago (atragantamientos) y la acidez esofágica son síntomas significativamente más comunes entre los adultos. En España la esofagitis eosinofílica tiene una prevalencia de 34.4/100 000. La media de retraso en el diagnóstico en niños es de 2,5 años, pero en adultos aumenta hasta una media de 7 años. Los médicos de familia y pediatras de Atención Primaria, junto con el resto de los profesionales sanitarios, especialmente el personal médico y de enfermería de Urgencias juegan un papel importante en su detección, pero su formación y actualización en el conocimiento de la patología no es siempre la adecuada. Los tratamientos dietéticos y la adecuada nutrición constituyen un pilar fundamental en el tratamiento de estos pacientes. Otro aspecto fundamental en el seguimiento de la enfermedad es el estado emocional del paciente, debido a la afectación de su calidad de vida. No poder comer provoca ansiedad y, en muchos casos, depresión y fagofobia.